Se acaba 2013 y hacemos balance. Un año lleno de cosas malas pero también de cosas buenas. Lo mejor de todo, haber entrado en la familia Argos y compartir tantos momentos con esos seres que dan sentido a mi vida, los perros.
Muchos de estos perros encontraron sus familias, otros nos abandonaron sin conocer el calor de un hogar pero sí el amor humano (de eso tenemos de sobra), y los menos siguen con nosotros.
A 2014 le pido un hogar para los que llevan más tiempo esperando y mucha suerte para los que llevan poco y llegarán. Y sobre todo le pido más conciencia y respeto en el trato a los animales.
OS DESEO UN FELIZ 2014
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